El jilguero: cuidados básicos

El jilguero: cuidados básicos

Para tener a nuestras aves en buen estado de salud no basta con poner a su disposición agua y comida, sino que requiere cuidar de igual manera tanto su alimentación como su higiene, su alojamiento y las condiciones en las que vive.

Aún más necesario es en el caso de aves que participan en concursos, como los canarios y los jilgueros. En estas aves, el estado anímico que presenten afectará a su canto tanto como a su aspecto general. Por ello es importante prestarles una adecuada atención.

Jilguero

El jilguero es un ave granívora que en libertad se alimenta de semillas de diversos árboles como el abedul, pinos, cipreses y otros. En cautividad hay que alimentarla con alpiste, verduras y frutas lo más variado posible. Además, dependiendo de la época del año, del clima y del gasto energético del ave deberemos ajustar su consumo.

Ejercitar las alas

Como próximamente vamos a hablar en profundidad de la alimentación del jilguero en ese post nos centraremos en otros cuidados igual de necesarios. Uno de ellos es el alojamiento. Las aves precisan hacer ejercicio con sus alas, por lo que tenerlas en jaulas diminutas no es una buena opción.

Debemos disponer de pajareras con unas dimensiones suficientes para que puedan efectuar pequeños vuelos que las mantengan activas. En el caso de los jilgueros tienen que disponer de agarraderos redondos con un diámetro adecuado al tamaño de sus garras.

Ventilado pero sin corrientes

La ubicación de la pajarera es otro factor muy importante. Tiene que estar resguardada de las corrientes de aire y de posibles depredadores y otros animales que puedan contagiarles parásitos. Los comederos y bebederos deben de mantenerse limpios y en cantidad suficiente para que puedan abastecerse todos los jilgueros que convivan juntos sin peleas.

La falta de ventilación e higiene de la pajarera es causa de enfermedades, así que hay que prestarle mucha atención. Una ventilación adecuada disminuirá la posibilidad de contagio de enfermedades y el aumento de oxígeno para facilitar la respiración.

Limpieza y desinfección semanal

Dependiendo del número de jilgueros que estén compartiendo el espacio, habrá que limpiar la pajarera con mayor asiduidad. La limpieza y desinfección elimina la posibilidad de que se produzcan focos de infección por la materia fecal y por la descomposición de los restos de alimentos.

Una vez a la semana, como mínimo, es preciso lavar bien tanto al base como los barrotes y palos de sujección y desinfectarlos. También la desparasitación de los jilgueros habrá de hacerse periódicamente para evitar la proliferación de ácaros y otros parásitos.