Intolerancias alimentarias en perros y gatos

Intolerancias alimentarias en perros y gatos

Nuestros perros y gatos también tienen alergias e intolerancias a ciertos alimentos, tal como nos ocurre a los humanos. Para empezar, no es lo mismo una intolerancia que una alergia. En el primer caso el organismo no digiere bien un cierto alimento y al consumirlo la persona o mascota puede sufrir una irritación de intestino o de estómago que haga que tenga cólicos o diarreas, por ejemplo.

Una alergia es un tema mucho más serio, ya que al consumir un alimento o producto determinado, el organismo interpreta que este es un invasor y el sistema inmunitario responde de una manera exagerada al mismo liberando diversas sustancias, como la histamina, que pueden causar graves reacciones, como fiebre, convulsiones y, en los casos más graves, incluso la muerte.

gatitos bebiendo leche

 

Algunos estudios afirman que es más común que existan intolerancias alimentarias en animales que no han mamado leche materna o que no lo han hecho el tiempo suficiente, ya que esta leche les transmite muchas defensas y anticuerpos de las que podrían carecer.

Intolerancias más comunes en perros y gato

Las intolerancias más comunes en nuestros perros y gatos serían las siguientes:

-La lactosa: No es común que los animales consuman leche de adultos y por tanto el organismo no está adaptado a la lactosa. Esta puede causar diarreas y molestias gástricas. Esto sucede incluso en cachorros, porque la leche de vaca es muy fuerte para ellos. En el caso de peludines muy pequeños es especialmente grave porque una diarrea seria puede acabar causando la muerte del cachorrito.

-El gluten: Muchos perros y sobre todo muchos gatos son intolerantes al gluten. Es lógico, ya que los cereales crudos son altamente tóxicos y jamás serían consumidos por ellos, por tanto su organismo no está diseñado para digerirlo. Muchos piensos llevan harinas de trigo y pueden causar alergias, en cuyo caso hay que optar por piensos libres de cereales.

-Adictivos: Algunos adictivos que se añaden a la comida pueden causar también intolerancia. Estos adictivos se utilizan para dar más sabor al alimento y, tal y como ocurre con la comida humana, son más frecuentes en comida de baja calidad para disfrazar su sabor y hacerlo más atractivo. Para evitar este problema se recomienda el consumo de piensos de gama alta.

En el próximo artículo vamos a saber un poco más sobre cómo podemos detectar una alergia alimentaria en nuestros peludines.